El entrenador del Barcelona, Xavi Hernández, se expresó con franqueza tras la sorprendente derrota de su equipo ante el Girona (2-4), reconociendo que el resultado es «desastroso», pero defendiendo el rendimiento del Barcelona en términos de juego.
«Si nos quedamos con el resultado, es desastroso, pero con el juego no», afirmó Xavi en la rueda de prensa posterior al partido. El técnico catalán destacó que ambos equipos mostraron una buena versión, pero la diferencia radicó en la efectividad. El Girona aprovechó sus momentos clave para inclinar la balanza a su favor.
A pesar de la derrota, Xavi se mostró optimista sobre el futuro y señaló que la Liga es larga: «La seguiremos luchando». Explicó que la molestia de la afición es comprensible, especialmente porque el Barcelona tuvo el control del partido en varias instancias, pero no pudo capitalizar esas oportunidades.
Xavi consideró la derrota como un «golpe bajo» y reconoció que el equipo no estuvo a la altura en la presión tras pérdida, un aspecto crucial que les había llevado al éxito en temporadas anteriores.
En cuanto a Èric García, cedido al Girona en el verano, Xavi expresó su deseo de retenerlo en el Barcelona. Destacó el éxito de la cesión de García y señaló que jugar sin presión en Girona es diferente a hacerlo en el Barcelona.
Por otro lado, el mediocampista del Barcelona, Ilkay Gundogan, admitió que la derrota se debió a «problemas defensivos» que impidieron frenar al Girona. Gundogan reconoció que colectivamente no defendieron como esperaban y resaltó la calidad del Girona en la posesión y la creación de espacios.
La sorpresiva caída ante el Girona deja al Barcelona reflexionando sobre sus debilidades defensivas y planteando interrogantes sobre el rendimiento del equipo de cara a los próximos desafíos.
