En una extensa investigación, se ha puesto bajo la lupa a la familia Martín Bringas, propietaria de la gigante empresa mexicana Soriana, una de las más acaudaladas según la lista de Forbes. La trama se desarrolla en torno a presuntos robos de terrenos, esquemas inmobiliarios sospechosos y condonaciones millonarias de impuestos por parte del Servicio de Administración Tributaria (SAT).
La historia se centra en un predio ubicado en Prolongación Mariano Otero 2166 en Zapopan, Jalisco, que está en el centro de un litigio desde el año 2017. El 4 de octubre de este año, un operativo impresionante con elementos de la Fiscalía General del Estado de Jalisco y altos directivos de Organización Soriana se desplegó para «restituir» el predio a Inmobiliaria Durango, en una acción que ha sido cuestionada y denunciada como ilegal por los legítimos propietarios.
La investigación revela la presunta participación de la familia Martín Bringas, propietaria de Soriana, en prácticas cuestionables relacionadas con la elusión fiscal. Se destaca la existencia de al menos diez empresas arrendadoras inmobiliarias vinculadas a Soriana, todas compartiendo el mismo domicilio en Monterrey. Estas empresas, incluida Inmobiliaria Durango, estarían involucradas en esquemas de arrendamiento y subarrendamiento de locales comerciales, generando un intrincado entramado de facturación intercompañía.
Se menciona que Soriana ha sido beneficiada a lo largo de los años con millonarias condonaciones de impuestos, aliviando significativamente su carga fiscal. Estas condonaciones se habrían producido en los gobiernos de Felipe Calderón Hinojosa, Enrique Peña Nieto y la actual administración de Andrés Manuel López Obrador, que no proporcionó información para la investigación.
La investigación profundiza en el año 2011, cuando Soriana adquirió 199 supermercados de Grupo Gigante. La compañía, que opera bajo diversas marcas, incluyendo Hipermercados Soriana y Soriana Super, ha logrado ingresos significativos, alcanzando 166 mil 13 millones de pesos en 2022, respaldando así la fortuna valuada en mil 300 millones de dólares de la familia Martín Bringas. En ese momento, la empresa habría obtenido condonaciones fiscales significativas del gobierno federal, lo que ha llevado a especulaciones sobre la posible influencia de estos beneficios en la decisión de adquirir Gigante.
Se destaca que, bajo la administración de Peña Nieto, Soriana se benefició del programa oficial «Ponte al Corriente», junto con otras grandes empresas, obteniendo condonaciones de créditos fiscales por un total de mil 458 millones de pesos entre 2015 y 2018.
La investigación también resalta episodios anteriores de controversias y sanciones contra Soriana, incluyendo su presunta participación en prácticas electorales cuestionables en 2012 y multas en 2017 por incumplimientos en condiciones de desinversión.
Este exhaustivo reporte arroja luz sobre una serie de prácticas y beneficios que plantean serias interrogantes sobre la ética empresarial y la relación de Soriana con las autoridades gubernamentales a lo largo de los años. La empresa, a pesar de sus ingresos millonarios y la presencia de sus propietarios en la lista de multimillonarios de Forbes, se ve envuelta en una trama de dudas y escándalos que demandan una mayor atención e investigación.
Además, se señala que la empresa ha utilizado prácticas que le permiten eludir impuestos, como en el caso de la adquisición de Grupo Gigante en 2011, donde se benefició de condonaciones fiscales. La investigación también destaca el perdón fiscal otorgado por el gobierno federal en 2007, cuando se le condonaron 163 millones 36 mil 959 pesos.
La investigación concluye que Grupo Soriana ha operado durante años entre escándalos políticos, problemas legales y multas oficiales por prácticas empresariales cuestionables, lo que plantea interrogantes sobre la integridad de una de las principales corporaciones en México.