Por Sinai Peña
La Secretaría de Salud ha emitido una advertencia sobre los riesgos asociados al alto consumo de carnes rojas y procesadas, resaltando la conexión con un aumento significativo en el riesgo de desarrollar cáncer colorrectal. La investigadora Tania Aburto Soto del Centro de Investigación en Nutrición y Salud (CINS) del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) ha revelado que el consumo diario de 50 gramos de carne procesada, como salchichas, jamón o carnes saladas, incrementa el riesgo de cáncer en un 18%.
La causa principal de este aumento en el riesgo se atribuye a las nitrosaminas, compuestos carcinogénicos presentes en las carnes procesadas. Estas sustancias se forman por la reacción entre las aminas (presentes en las carnes) y los nitritos, comúnmente añadidos para la conservación de estos productos cárnicos. La experta destaca que aunque los nitritos se encuentran naturalmente en otros alimentos como las verduras, el problema radica en su reacción con las aminas, generando nitrosaminas, potencialmente dañinas para las células del sistema digestivo.
Aburto Soto subraya que las carnes procesadas no solo aumentan el riesgo de cáncer colorrectal, sino que también se convierten en fuentes de derivados que contribuyen a la formación de carcinógenos potentes en el intestino, elevando el riesgo de otras enfermedades como aterosclerosis, resistencia a la insulina y problemas endoteliales.
La investigadora estima que aproximadamente el 20% de los casos de cáncer colorrectal podrían evitarse eliminando el consumo de carne procesada. Además, advierte sobre los riesgos asociados con la cocción a altas temperaturas de la carne roja, que puede dar lugar a la acumulación de compuestos carcinogénicos. Recomienda sustituir las carnes rojas por opciones más saludables como pescado y leguminosas como frijoles, garbanzos y lentejas, lo que no solo reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares y diabetes tipo 2, sino que también contribuye a una dieta más sostenible.
En línea con estas recomendaciones, la Secretaría de Salud sugiere adoptar una alimentación saludable y sostenible, basada en proteínas de origen vegetal, cereales, leguminosas, lácteos y huevos. Estudios respaldados por la Comisión EAT-Lancet, con participación del INSP, indican que reducir a la mitad el consumo de carne roja podría prevenir alrededor del 9% de las muertes en hombres y el 8% en mujeres. La comisión recomienda un consumo diario de 28 gramos de carne roja, cerdo o cordero como parte de una dieta equilibrada y saludable.