Por Kari Nava
Ciudad de México, 18 de noviembre de 2023.– En medio del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) que tiene lugar en San Francisco, California, la presencia del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, no solo se hace sentir en el ámbito político y económico, sino también en la cultura popular con la explosiva popularidad de los «AMLITOS» o Pejeluches.
Estos muñecos, que reproducen la figura del presidente mexicano, se han convertido en un fenómeno que trasciende las fronteras, encontrando su espacio en las calles de Estados Unidos. Vendedores ambulantes, aprovechando la presencia del mandatario en el APEC, han comenzado a ofrecer estos curiosos muñecos a los transeúntes y visitantes, con precios que oscilan entre los 30 y 70 dólares, equivalentes a alrededor de mil 200 pesos mexicanos.
La presencia de estos «AMLITOS» no solo ha llamado la atención por su particular diseño, sino también por la diversidad de versiones disponibles. Desde la figura clásica del presidente con traje y banda presidencial, hasta las variantes más identificativas con la política de López Obrador, como aquellas que lo muestran con el chaleco que lleva las siglas de Morena, su partido político.
Sin embargo, lo que ha capturado la imaginación de los compradores son los «parlantes», muñecos que reproducen algunas de las frases más célebres y características del presidente mexicano. Los «parlantes» del AMLITO se han convertido en una atracción particular, emitiendo frases como «¡Me canso ganso!», «Lo que diga mi dedito», y «¡Tengan para que aprendan!», entre otras, que han dejado una marca imborrable en el discurso político y social de México.
Este fenómeno, que combina el ingenio comercial con la expresión cultural y política, refleja la manera en que la figura de López Obrador ha permeado en la sociedad, no solo en México sino también más allá de sus fronteras. La presencia de estos muñecos en las calles de San Francisco es un testimonio de cómo la política puede fusionarse con la cultura popular, creando objetos que no solo entretienen, sino que también reflejan la complejidad y la diversidad de la percepción pública hacia los líderes políticos.
Aunque algunos podrían ver en los «AMLITOS» un simple objeto de entretenimiento, su presencia en un evento de importancia internacional como el APEC resalta la capacidad de la cultura popular para trascender las barreras geográficas y políticas, sirviendo como un recordatorio de la influencia de la Figura presidencial en la vida cotidiana y la imaginación colectiva.