Confinada entre las montañas y el mar Negro, el país esconde algunos de los lugares menos visitados de Europa, como lo son las torres fortificadas de la región de Svaneti.
Georgia es un país muy pequeño, pero habitado por gente con un orgullo gigantesco. A los georgianos les gusta contar al extranjero que cuando Dios hizo el mundo, convocó a todas las naciones para repartir las tierras. Ellos acudieron al encuentro cantando, bailando y parando numerosas veces para brindar por Dios con vino del bueno (se jactan de que lo inventaron ellos) por lo que llegaron tarde a la cita. Al verlos aparecer, Dios les preguntó que cómo habían llegado tan tarde, que ya estaba todo repartido. Cuando los georgianos le dijeron que el motivo era que iban disfrutando de la vida y brindando por él con el fruto de sus vides, Dios quedó maravillado con aquella gente tan simpática y les dio para vivir un trocito de paraíso que se lo tenía guardado para sí mismo. Era Georgia
Sí, es posible que los georgianos no tengan abuela. Pero parte de razón tienen cuando presumen de país bello. Las altivas torres medievales de Svaneti se recortan sobre las montañas nevadas del Cáucaso. Monasterios medievales con siglos de historia jalonan las cumbres de colinas que han visto pasar a casi todos los ejércitos de la antigüedad. Los viñedos de los valles más orientales llevan dando uva desde tiempos inmemoriales (parece ser que hay evidencias de vinificación en la región desde hace unos 8.000 años). Popes ortodoxos entonan cánticos que suenan a gloria en el interior de oscuras iglesias cubiertas de iconos y frescos. Las cúpulas de los baños termales de origen otomano ponen una nota de exotismo en la capital, Tbilisi. Mientras que las evidencias del ramal de la ruta de la seda que pasaba por aquí siguen presentes en ciudades trogloditas y antiguos caravasares. Sí, Georgia es un destino que merece la pena descubrir.
Estuve en Semana Santa en este pequeño y desconocido país del sur del Cáucaso con un grupo de El País Viajes. Resultado de aquella aventura es este vídeo que trata de resumir la esencia de una nación enclavada en plena ruta de Occidente a Oriente y con una convulsa historia, fruto precisamente de esa estratégica ubicación.
