A partir de hoy, la Ciudad de México y el Estado de México se encuentran en medio de la peor crisis en la historia del Sistema Cutzamala debido a la drástica escasez de lluvias. La Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha acordado con los gobiernos estatales de ambas entidades la reducción de un metro cúbico por segundo en el suministro de agua al Valle de México.
Esta disminución, que entra en vigor hoy, significa que el suministro se reducirá de 13.2 a 12.2 metros cúbicos por segundo, afectando a aproximadamente el 25 por ciento de la población de la región. Según la Conagua, el Sistema Cutzamala cuenta actualmente con un almacenamiento de 309.99 millones de metros cúbicos, lo que equivale a apenas el 39.6 por ciento de su capacidad, marcando el nivel más bajo desde 1996.
La baja captación de agua de lluvia ha obligado a tomar medidas inmediatas. La Conagua, junto con el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) y la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM), están llevando a cabo esfuerzos coordinados para asegurar el abastecimiento de agua potable a la población. Esto incluye la perforación de pozos y la utilización de la presa Madín como fuentes alternativas.
Esta situación demanda un uso responsable y eficiente del agua por parte de los habitantes de la región, así como la implementación de medidas de conservación a nivel comunitario. Las autoridades hacen un llamado a la solidaridad y colaboración de la ciudadanía para superar esta crítica situación.
La reducción en el suministro de agua tendrá un impacto directo en la vida diaria de miles de personas en la Ciudad de México y el Estado de México. Se espera que esta medida sea mantenga hasta que las condiciones climáticas mejoren y se restaure la capacidad normal del Sistema Cutzamala.
Es imperativo que la población se mantenga informada a través de los canales oficiales y acate las recomendaciones de ahorro y uso responsable del agua proporcionadas por las autoridades. La crisis en el Sistema Cutzamala es un llamado urgente a la conciencia ambiental y la necesidad de implementar medidas sostenibles para garantizar el acceso al agua en el futuro.