Beneficios psicológicos
Los dueños de perros son menos propensos a sufrir de depresión que los no propietarios de mascotas. Incluso para aquellas personas que desarrollan una depresión clínica, tener una mascota puede ayudarles a salir de un episodio depresivo mayor de manera más eficaz incluso que la medicación.
Los perros de servicio son adiestrados para ayudar a lidiar con los distintos síntomas del trastorno de estrés postraumático (TEPT) que padecen algunos soldados cuando regresan de combates.
Estos tratamientos con caninos ayudan a lidiar con el enojo, pesadillas o insomnio, hipervigilancia, recuerdos recurrentes, sentimientos de revivir el evento traumático, entumecimiento emocional, aislamiento social para reintegrar al afectado a la vida civil.
Incrementa la inmunidad
Los perros están cubiertos de gérmenes. Tener un perro en la casa significa más bacterias en el hogar y por tanto sus ocupantes están más expuestos a ellas (estudio sobre “la biodiversidad relacionada con el perro “), especialmente alta en las fundas de la almohada. Por esta razón las personas con perros parecen enfermar con menos frecuencia y menos severamente que las personas que no tienen perro.
Asimismo, una casa con un perro hace que los niños sean menos propensos a desarrollar alergias en el transcurso de sus vidas según estudio de Cincinnati Childhood Allergy & Air Pollution Study (CCAAPS).
Beneficios terapéuticos
Estudios realizados por el Centro Waltham de Mars, pionero y líder científico a nivel mundial en nutrición y bienestar para los animales de compañía, se ha demostrado que, en los niños con autismo, las intervenciones asistidas con animales han facilitado las mejoras en áreas críticas como el funcionamiento social, la concentración y atención.
Los perros de asistencia tienen el rol de realizar algunas de las funciones y tareas que la persona no puede ejecutar como consecuencia de una discapacidad. Por ejemplo: el perro de Señal es clave para las personas con discapacidad auditiva, mientras que el perro Lazarillo lo es para personas con discapacidad visual.
Tu corazón estará más saludable
El solo hecho de acariciar a un perro reduce la frecuencia cardíaca y la presión arterial. Un estudio chino encontró que las personas que tienen un perro consiguen dormir mejor por la noche y se enferman con menos frecuencia. Otros estudios muestran que los dueños de mascotas tienen ligeramente más bajo el colesterol y tienen más probabilidades de sobrevivir a un ataque al corazón.