El quarterback estrella, Aaron Rodgers, ha protagonizado una rehabilitación milagrosa tras sufrir una rotura del tendón de Aquiles hace apenas tres meses. Si bien apunta a regresar con los New York Jets en la víspera de Navidad contra los Washington Commanders, Rodgers enfatiza que su salud será la prioridad ante cualquier retorno.
Durante su participación en el Pat McAfee Show, el cuatro veces MVP de la NFL declaró que determinará el momento adecuado para su regreso basándose en su salud y las posibilidades de playoffs para los Jets. Rodgers afirmó: «Siempre ha sido, primero, ¿estoy sano? Entonces, ¿seguimos vivos en los playoffs? ¿Puedo protegerme y jugar al nivel que soy capaz de jugar? Pero la primera parte es la salud. ¿Puedo protegerme? ¿Puedo moverme como quiero?»
En la actualidad, los Jets se encuentran en la penúltima posición de la Conferencia Americana con un récord de 4-7 después de 12 semanas. El Football Power Index de ESPN les otorga una probabilidad del 0.4% de llegar a los playoffs. Rodgers señala que su regreso dependerá de factores cruciales, incluida la capacidad de protegerse y jugar al más alto nivel.
A pesar de la urgencia del entrenador Robert Saleh por el retorno de Rodgers, el experimento con Zach Wilson y Tim Boyle no ha brindado los resultados deseados. Rodgers reconoce que, aunque su salud mejora, aún no está en condiciones de tomar una decisión inmediata para volver al campo de juego.
«Aún no estamos en el punto en el que pueda tomar una decisión sobre jugar porque estoy mejorando, pero no estoy en la capacidad de jugar en este momento», explicó Rodgers.
La ausencia de Rodgers, a pesar de disputar solo cuatro jugadas para los Jets, ha dejado una brecha notoria en la ofensiva del equipo, que actualmente ocupa la segunda peor posición en yardas por pase y touchdowns aéreos en la liga, con 1,835 y siete, respectivamente.
