Por Diana Silva
Practicar una actividad física o deportiva desde temprana edad es esencial para el desarrollo integral de cualquier persona. Además de ser una herramienta efectiva para combatir el sedentarismo, que afecta a más del 58% de los mexicanos, el deporte en la infancia promueve habilidades físicas y mentales fundamentales.
Según la Fundación Nemours, la mayoría de los niños desarrollan habilidades físicas y atención necesaria para los deportes entre los 6 y 7 años. Por lo tanto, es crucial fomentar este hábito desde pequeños.
En México, deportes como fútbol, taekwondo, baloncesto, natación, entre otros, son populares entre los jóvenes, y muchos han destacado a nivel mundial en estas disciplinas desde temprana edad. Es vital que los padres apoyen y acompañen a sus hijos en esta pasión deportiva, convirtiéndola en un estilo de vida.
Laura María Serrano, experta en psicología de Genuine Digital School, enfatiza la importancia de construir un proyecto de vida desde la infancia, lo que permite establecer expectativas realistas y tomar decisiones adecuadas para materializarlo. Serrano ofrece valiosos consejos para los padres que desean apoyar a sus hijos en su camino deportivo:
- Fomentar la confianza y autoestima elogiando los esfuerzos y logros, no solo los resultados.
- Enseñar una mentalidad de crecimiento, aprendiendo de los errores y enfrentando desafíos de manera positiva.
- Brindar un ambiente de apoyo donde se pueda hablar de sentimientos y preocupaciones relacionadas con el deporte.
- Promover un equilibrio saludable entre el deporte y otras actividades para evitar el agotamiento físico y emocional.
- Desarrollar habilidades de comunicación y liderazgo esenciales para el éxito deportivo.
- Enseñar una perspectiva a largo plazo y prepararse para la vida después del deporte.
Serrano también destaca la importancia de elegir un colegio que fomente el desarrollo integral de los estudiantes, incluyendo opciones extracurriculares como el deporte. Un colegio virtual con flexibilidad para realizar actividades desde cualquier lugar podría ser una excelente opción en este sentido.
Fomentar el deporte desde la infancia no solo contribuye a la salud física, sino que también promueve el desarrollo emocional, social y cognitivo de los niños, preparándolos para una vida plena y exitosa.