Por Marco A. Reyes
El Club Tigres y el Vancouver Whitecaps protagonizaron un emocionante encuentro en la Concachampions que mantuvo a los aficionados al borde de sus asientos hasta el último minuto. Con un empate de último momento, ambos equipos demostraron su calidad y determinación en el terreno de juego.
El partido, disputado en el estadio Westhills en Vancouver, comenzó con un ritmo frenético, con ambos equipos buscando imponer su juego desde el pitido inicial. El Club Norte Americano, tomó la delantera temprano en el encuentro con un gol espectacular, que encendió la euforia de la afición local.
A partir de ahí, el encuentro se convirtió en un duelo intenso, con oportunidades de gol para ambos lados y una defensa sólida que evitó más anotaciones.
A medida que el reloj avanzaba, el Club Tigres intensificó su ataque en busca del gol de la victoria, mientras que el Vancouver Whitecaps se defendía con uñas y dientes para mantener el empate, sin embargo el de club Tigres en su afán de atacar, dejaría de lado la defensa, con lo que el conjunto de la MLS, aprovecharia para descontar el 2-0, para fortuna de los del norte de México, el VAR entraría en acción, marcando fuera de lugar, que daría a los Tigres, minutos mas de vida.
Cuando parecía que el tiempo se agotaba, llegó el momento decisivo: un emocionante gol de último minuto del Club Tigres que desató la celebración entre jugadores y aficionados.
André-Pierre Gignac sería el encargado de hacer el gol del empate, con un impresionante tiro libre que fue directo a la escuadra del arquero rival, para dejar a los de Monterrey con la esperanza viva en el juego de vuelta, la siguiente semana en el Volcán
El empate final fue un reflejo del esfuerzo y la entrega de ambos equipos en el terreno de juego. Aunque ninguno logró llevarse la victoria, el resultado dejó claro que tanto el Club Tigres como el Vancouver Whitecaps son rivales formidables en la Concachampions y están dispuestos a luchar hasta el final por el título.