Por Kari Nava
Carlos Bremer, el reconocido empresario regiomontano, se convirtió en una figura emblemática en el programa Shark Tank México, donde participó durante seis temporadas. Su carisma, entusiasmo y compromiso con el apoyo a jóvenes emprendedores lo catapultaron como uno de los «tiburones» más queridos del programa.
Bremer, con una trayectoria empresarial destacada, participó en el programa con la intención de devolver el apoyo que él mismo recibió en sus inicios como emprendedor. Su historia personal incluyó la venta de calculadoras a grandes empresarios en Monterrey, quienes fueron fundamentales para impulsar su propio negocio. Esta conexión con sus raíces emprendedoras influyó en su enfoque al evaluar y respaldar proyectos en Shark Tank.
Durante su participación en el programa, Bremer se destacó por su interés en proyectos con propósitos sociales y la capacidad de generar empleo. Su visión trascendió más allá de la simple inversión; buscaba emprendimientos con un impacto positivo en la sociedad y, al mismo tiempo, generadores de oportunidades laborales.
Entre las inversiones notables de Carlos Bremer en Shark Tank México se encuentran:
1. Autocinema Coyote:
- La cadena de Autocinema Coyote buscaba expandirse y encontrar socios estratégicos. Bremer, convencido desde la presentación de Isaac Ezban, cofundador del proyecto, se asoció con Rodrigo Herrera, invirtiendo 3.5 millones de pesos por el 30% de participación en la empresa. La cadena expresó su agradecimiento tras el fallecimiento de Bremer, destacando su confianza y enseñanzas.
2. MiTu:
- MiTu, dedicada al diseño y comercialización de calzado de dama, captó la atención de Bremer y Rodrigo Herrera. A cambio de una inversión de 1.6 millones de pesos, cedieron el 40% de su empresa. Esta asociación no solo representó un respaldo financiero, sino también un impulso para diseñadores mexicanos y la promoción de un trato digno en la elaboración del calzado.
3. HELPO:
- HELPO, un spa de bolsillo con roll-ons de aromaterapia presentado por Karina Álvarez, inicialmente no convenció a todos los «tiburones». Sin embargo, el entusiasmo de Karina cautivó a Bremer y Arturo Elías Ayub, quienes ofrecieron 750,000 pesos por el 30% de la empresa. La condición: ser invitados a los próximos tres proyectos de Karina, demostrando la confianza y compromiso de Bremer con los emprendedores.
Más allá de sus inversiones, Carlos Bremer dejó un legado basado en la importancia del trabajo en equipo y la valoración de las habilidades de los socios. Su filosofía de colaboración lo llevó a asociarse en varias ocasiones con otros «tiburones» presentes en el set, como Arturo Elías Ayub, Rodrigo Herrera, Jorge Vergara y Patricia Armendáriz. Este enfoque no solo amplió las posibilidades de éxito para los emprendimientos, sino que también dejó una lección valiosa sobre la fuerza de la colaboración en el mundo empresarial.
La triste noticia del fallecimiento de Carlos Bremer conmovió a la comunidad emprendedora y al público en general. Su contribución al ecosistema emprendedor, su legado de apoyo y su carisma perdurarán como un recordatorio de la importancia de impulsar y respaldar a la próxima generación de empresarios.
