Por Dayana Mendizabal
Las ardeidas son una familia de aves zancudas pertenecientes al orden Pelecaniformes, conocidas comúnmente como garzas. Anteriormente, se clasificaban en el orden Ciconiiformes. Hay más de sesenta especies de garzas distribuidas en todo el mundo, con hábitats principalmente en zonas pantanosas o cercanas a lagos.
Estas aves tienen patas y cuellos largos, y algunas especies pueden medir hasta 85 cm de altura. Su plumaje es generalmente blanco, pico amarillo y patas grises, aunque hay variaciones estacionales. Las garzas son solitarias, pero durante la época de cría pueden reunirse en comunidades. Anidan en árboles altos y ponen hasta seis huevos en nidos toscos.
Las garzas son aves carnívoras y se alimentan de peces, crustáceos, anfibios y otros animales acuáticos. Son importantes en el control de especies invasoras. Son una familia cosmopolita, distribuida en todos los continentes excepto la Antártida, y habitan una variedad de entornos acuáticos.
Son aves migratorias y se asocian principalmente con humedales. La caza es una parte crucial de su comportamiento, y utilizan diversas estrategias, desde esperar pacientemente hasta caminar lentamente para capturar presas. Algunas especies también usan cebo para atraer peces.
La reproducción varía, pero en general, las garzas son monógamas y mayormente coloniales. La mayoría anida cerca o sobre el agua, en árboles o vegetación. Realizan exhibiciones y rituales de cortejo, y la puesta suele consistir en tres a siete huevos, aunque puede variar según la especie y la ubicación geográfica.