Por Sinai Peña
Un reciente estudio llevado a cabo por la Universidad Ruhr de Bochum y el Centro Alemán de Salud Mental (DZPG) ha arrojado resultados prometedores sobre el impacto de reducir el uso diario de las redes sociales. La investigación, publicada en la revista «Behaviour and Information Technology», demostró que disminuir en solo 30 minutos al día la interacción en redes sociales puede tener efectos positivos significativos en la salud mental y la productividad laboral.
El estudio, que incluyó a 166 participantes trabajadores, dividió a los sujetos en dos grupos. Mientras un grupo mantuvo sus hábitos habituales en redes sociales, el otro redujo su tiempo en estas plataformas en 30 minutos diarios durante una semana.
Los resultados revelaron que aquellos que redujeron su tiempo en redes sociales experimentaron una notable disminución en la sensación de exceso de trabajo y miedo a ser despedidos. Además, reportaron sentirse mentalmente mejor y más satisfechos con su trabajo al enfocarse más en sus responsabilidades laborales.
La coautora del estudio, Julia Brailovskaia, profesora asociada de la Universidad del Ruhr, comentó que la constante distracción que generan las redes sociales puede afectar la concentración en las tareas, resultando en un rendimiento laboral inferior. Esta investigación resalta la importancia de minimizar la interferencia de las redes sociales para mejorar la concentración y el compromiso en el entorno laboral.