El concierto de Romeo Santos en Venezuela se convirtió en un caos este fin de semana cuando el cantante salió al escenario con más de ocho horas de retraso, desatando la indignación de sus seguidores. El esperado show, programado para comenzar a las 21:00 horas, no empezó hasta las 04:00 de la madrugada siguiente, llevando a los asistentes a manifestar su frustración con abucheos y cánticos de «¡Estafa, estafa!».
En un giro inesperado, el «Rey de la bachata» apareció finalmente para enfrentar a su público en las primeras horas del domingo, ofreciendo disculpas y explicando la situación. Santos culpó a la empresa organizadora por la falla en la logística, calificando el retraso como una falta de respeto hacia él, su equipo y sus seguidores.
Este no fue un incidente aislado, ya que el cantante reveló que era la segunda vez que enfrentaba una situación similar con la misma empresa. Señaló la falta de organización y responsabilidad por parte de la compañía, manifestando su descontento por verse involucrado en una situación que afecta tanto su carrera como la experiencia de sus fans.
A pesar del retraso masivo, una vez en el escenario, Santos agradeció a los asistentes y llevó a cabo el espectáculo sin más inconvenientes. Explicó que la demora se debió a problemas con la producción que venía desde Perú, revelando que incluso consideraron cancelar el show antes de optar por presentarse a altas horas de la madrugada como solución de último minuto.
El cantante se disculpó profundamente con sus seguidores por la espera prolongada y finalmente ofreció el tan esperado concierto, asegurando que haría valer la pena la espera hasta que saliera el sol. Esta situación desató especulaciones y críticas en redes sociales, con algunos vídeos que mostraban la llegada tardía de Santos al país y explicaciones de los organizadores sobre la falta de piezas del escenario, mientras los fans expresaban su descontento.
