Por Sinai Peña
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha reportado preocupantes brotes de ántrax en cinco países africanos, con un total de 1,100 casos sospechosos y 20 fallecimientos en lo que va del año. Zambia se encuentra experimentando su peor brote desde 2011, con nueve de sus diez provincias afectadas, reportando 684 casos sospechosos, 25 confirmados y cuatro muertes hasta el 20 de noviembre.
A pesar de la propagación territorial, la OMS ha destacado que hasta el momento solo se han notificado «casos esporádicos» en animales y humanos en Zambia. Sin embargo, se ha observado un aumento en las muertes humanas en otros países afectados, como Kenia, Malaui, Uganda y Zimbabue, donde el ántrax es endémico y se presentan brotes estacionales.
La organización señala que el retraso en la búsqueda de atención médica por parte de los pacientes ha contribuido al aumento de muertes en estos países. Además, existe la preocupación de que la enfermedad pueda propagarse a otras naciones debido a los movimientos transfronterizos frecuentes de animales y humanos.
La directora para África de la OMS, Matshidiso Moeti, subrayó la necesidad de romper el ciclo de infección, haciendo hincapié en la prevención de la enfermedad en los animales. La OMS está respaldando los esfuerzos de los países afectados para controlar estos brotes.
El ántrax, una enfermedad bacteriana que afecta a herbívoros domésticos y salvajes, puede transmitirse a los humanos a través del contacto con animales infectados o la exposición a productos contaminados derivados de esos animales. La OMS insta a medidas preventivas para contener la propagación regional de la enfermedad.
Es esencial que las comunidades afectadas y los países vecinos intensifiquen las medidas de control y prevención para evitar un mayor deterioro de la situación y proteger la salud pública en la región.