Por Diana Silva
En medio de tensiones y negociaciones internas, Dante Delgado, líder de Movimiento Ciudadano (MC), ha iniciado conversaciones para designar al sucesor de Samuel García como candidato presidencial. La delicada situación del partido naranja, que corre el riesgo de perder su registro, ha generado una serie de consultas jurídicas, especialmente después de la exclusión de Mariana Rodríguez debido a restricciones de edad.
En las últimas horas, dos posibles candidatos han surgido en este complejo tablero político. Uno de ellos es el senador Juan Zepeda, quien se retiró el año pasado de la elección del Estado de México por decisión de Dante. Zepeda, reconocido por su pasado como alcalde de Nezahualcóyotl, podría capitalizar su influencia en el centro del país y alinearla con el respaldo político de MC en Jalisco y Nuevo León.
La otra opción es Jorge Álvarez Máynez, coordinador de la campaña de Samuel García y hombre de confianza de Dante Delgado. Sin embargo, la posibilidad de aceptación en el grupo jalisciense, donde Enrique Alfaro aún ejerce una fuerte influencia, plantea un desafío significativo.
Dante Delgado, quien inicialmente visualizaba el proyecto presidencial de Samuel García como una oportunidad para alcanzar el segundo lugar en la elección presidencial y consolidar una sólida bancada en el Senado, enfrenta ahora la difícil tarea de mantener el registro del partido y evitar una elección equivocada que podría poner en riesgo el liderazgo de MC.
La molestia de Delgado se centra en el entorno del gobernador que respaldó el proyecto de García, un respaldo que ahora parece desvanecerse ante la falta de negociación y acuerdo. El mensaje confrontativo de Samuel García el sábado por la noche agrega un elemento más a la complejidad de la situación política en Movimiento Ciudadano.
