En un dramático giro de los acontecimientos, las fuerzas israelíes llevaron a cabo un asalto al Hospital Al Shifa en Gaza en medio del conflicto con Hamas. El hospital, ya bajo condiciones críticas, se ha convertido en un símbolo del sufrimiento de los civiles palestinos durante esta guerra. Se informa de tanques israelíes dentro del complejo, con soldados ocupando áreas cruciales como los departamentos de urgencia y cirugía.
El director de hospitales de Gaza, Mohammed Zaqout, denunció la situación como aterradora, con pacientes, incluyendo niños y recién nacidos, aterrorizados. Según él, las fuerzas de ocupación han asaltado los edificios, y la población se encuentra en una situación desesperada.
El ejército israelí afirma estar llevando a cabo una «operación precisa y selectiva contra Hamas» en una parte específica del hospital. Alegan que Hamas utiliza el hospital como centro de mando, acusaciones que el grupo y el personal del centro han negado repetidamente.
Estados Unidos, basándose en inteligencia, sugiere que Hamas ha utilizado hospitales, incluido Al Shifa, y los túneles debajo de ellos, para respaldar operaciones insurgentes y retener cautivos. Las fuerzas israelíes, además de buscar a rehenes, argumentan que están acompañadas de equipos médicos y suministros para bebés.
El conflicto ha llevado a la evacuación de la mayoría de los habitantes de Gaza, con más de 11,200 personas, principalmente mujeres y niños, reportadas muertas. Las condiciones humanitarias en la región empeoran, y la agencia de la ONU para los refugiados palestinos advierte sobre la inminente interrupción de las operaciones de ayuda, incluido el suministro de alimentos y medicinas.
La situación sigue siendo crítica, con el hospital de Al Shifa siendo el epicentro de un enfrentamiento que añade sufrimiento a una población ya gravemente afectada por la violencia y la falta de recursos básicos.