La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) ha anunciado la decisión de mantener la tasa de interés interbancaria a un día en un 11.25%, marcando la quinta ocasión consecutiva en la que optan por no realizar cambios en la política monetaria. Además, anticiparon que esta tasa se mantendrá «por cierto tiempo» con el objetivo de lograr la convergencia ordenada y sostenida de la inflación general a la meta del 3%.
A pesar de mantener la tasa sin cambios, Banxico ajustó a la baja su pronóstico de inflación para el cierre del año 2023, estimando ahora una variación anual del 4.4%, por debajo del 4.7% proyectado en septiembre. Este ajuste sugiere una postura más moderada en relación con la inflación, aunque la Junta de Gobierno señala la necesidad de mantener la tasa actual para alcanzar la meta de inflación a largo plazo.
El Subgobernador Jonathan Heath destacó en Twitter que el comunicado de Banxico proporciona una «guía prospectiva», indicando que la tasa de referencia se mantendrá en su nivel actual por un tiempo considerable. Analistas como Carlos Morales de Fitch sugieren que esta señal implica que la tasa podría permanecer sin cambios hasta principios de 2024, reduciéndose con precaución a partir de entonces.
Desde una perspectiva internacional, Alberto Ramos de Goldman Sachs señala que la decisión de Banxico confirma la expectativa de que la política monetaria se mantendrá en territorio restrictivo incluso en 2024, lo que podría mantener ajustado el acceso a las condiciones crediticias.
La decisión de Banxico refleja la cautela en medio de la incertidumbre económica y busca equilibrar la estabilidad financiera con el objetivo de mantener la inflación bajo control.